A la hora de diseñar una formación e-learning es bastante probable que te encuentres con diversos obstáculos. Por ello, hemos pensado en ti a la hora de seleccionar todas las claves que deberías tener en cuenta para lograr una formación online con la que tus empleados disfruten.

Recomendaciones para crear una formación perfecta y eficaz

Si es tu primera vez desarrollando un curso de formación online para tus empleados, seguramente tendrás la impresión de que tienes que contar con miles de recursos para que tu formación salga bien. Nada más lejos de la realidad. Con que prestes atención a algunos aspectos básicos tu training saldrá adelante. En los siguientes puntos te contamos algunos de estos básicos que no debes olvidar incluir en tu programa formativo.

La importancia del índice

Lo habitual es que el curso se vaya viendo por etapas. Un índice permite seleccionar el vídeo o el apartado correspondiente con mayor facilidad. La accesibilidad a cualquier punto del curso es siempre recomendable porque evita que el alumno tenga que realizar un peregrinaje por cada una de las pantallas de forma sencuencial cuando quiere repasar algo. Además, un índice les dará a tus empleados una idea previa del alcance del curso preparándolos y añadiendo contexto para la información que vas a compartir con ellos.

Incorpora elementos multimedia

Los cursos más eficaces no son los que incluyen más contenido, sino los que aportan un valor añadido. Es más didáctico ofrecer un vídeo, gráficos o animaciones que colgar una serie de temas textuales que terminan provocando el aburrimiento de quien los consulta. Una de las alternativas más de moda es el podcast al permitir que se pueda descargar el archivo y escucharlo en cualquier momento. En un contexto social como el que vivimos, en el que muchos empleados pelean para conciliar su vida familiar y laborar, alternativas como el podcast, que les permitan consumir en contenido cuando salen a caminar o cuando van en transporte público suponen abrir una vía para que cada uno adapte a su ritmo de vida la formación.

Si incorporas elementos multimedia recuerda siempre la máxima de que aporten valor, ya que tampoco será útil que llenes una pantalla de vídeos que repiten lo mismo que se puede leer en un párrafo. Busca siempre que los recursos que incorpores complementen y aporten significado al alumno.

Apuesta por la información actualizada y por la especialización

La formación online debe centrarse en temas concretos. Es imprescindible que incorpores siempre la información más actualizada y las nuevas tendencias al respecto. Evita el contenido de relleno y céntrate en los aspectos más relevantes de cada materia.

Una vez que ya tienes un contenido base que trasladar a tus empleados...

¿Qué plataforma es la más adecuada para subir un curso de e-learning?

Tanto si se trata de ampliar la formación de los empleados como de facilitar el onboarding de un nuevo profesional, debes elegir muy bien dónde vas a subir tu contenido. La opción de usar la sección de RRHH de la web corporativa implica que:

• Tengas que trabajar el doble para subir el curso totalmente terminado.
• No encuentres las herramientas necesarias para que el resultado sea didáctico y entretenido.
• Tiendas a limitarte a subir los temas correspondientes sin ningún tipo de apoyo gráfico o multimedia debido a la falta de tiempo, o a la escasez de recursos, para hacer un buen trabajo.

¿Cuál es la solución más recomendable en este caso? El uso de un campus virtual de código libre. Esta opción te permite generar cursos a medida, incorporar elementos multimedia y convertir el diseño de un curso en un proceso sin tantas dificultades, pero sobre todo más adecuado a tus necesidades.

¿Cuáles son las ventajas de apostar por un campus virtual para la formación empresarial?

Lo principal es que puedes crear una plataforma de formación independiente que te permite ir añadiendo cursos, actualizaciones y todo lo que estimes oportuno. Pero, además también te permite:

• Alojar todos los cursos anteriores facilitando así su consulta.
• Incorporar ejercicios de autoevaluación y evaluación que ayudan a saber si se ha superado cada etapa de la formación.
• Añadir contenido SCORM a tus cursos. Las siglas hacen referencia a Shareable Content Object Reference Model (Modelo de referencia para objetos de contenido compartible). De este modo podrás tener tu catálogo de cursos y también incorporar cursos ya listos para usar de tus colaboradores o proveedores, ya que SCORM es un estándar en la industria del e-learning.
• Consultar el catálogo de innovación y cualificación. En el mismo se especifica la utilidad del curso correspondiente. Puede tratarse de un certificado de profesionalidad, de una especialidad formativa o una capacitación profesional. Un campus virtual te permitirá ir almacenando las competencias de tus empleados, detectando qué areas siguen sin ser cubiertas o qué competencias les faltan a tus empleados si, por ejemplo, cambian de posición en tu empresa.

A los beneficios anteriores habría que añadirle el más valioso: la opción de consultar el curso a través de cualquier dispositivo de escritorio o móvil. Esta característica permite que cualquier empleado pueda acceder desde su teléfono o tableta más fácilmente, permitiéndole decidir en todo momento qué es lo más cómodo para el: formarse al estilo clásico desde un despacho o en movimiento desde el móvil (por ejemplo en el trayecto que usa para desplazarse al trabajo).

Tu objetivo como responsable de formación es que el curso no sea una molestia o un mero trámite para el empleado. Más bien, debe convertirse casi en una actividad de ocio en la que las ideas más importantes queden reflejadas claramente y donde la usabilidad esté siempre presente. Enfócalo, en la medida de lo posible, como un juego en el que hay que ir superando etapas hasta llegar al final.

¿Cómo debe ser la evaluación de cada curso?

Es el último paso, pero el más importante. Los resultados obtenidos te servirán para saber si tu formación está bien diseñada o si necesita algún tipo de cambio. Te recomendamos que:

• Crees un plan de evaluación específico para cada curso. Tienes que concretar quién evaluará el curso y de qué forma. Nadie como tú para saber cuál es la fórmula más apropiada para tu plantilla de trabajadores.
• Elijas un sistema de recogida de datos fiable. Ha de tener como base el plan especificado en el punto anterior. Sin embargo, has de ponerlo en práctica en tiempo real para comprobar cuáles son los puntos débiles del curso.
• Decidas tu próxima formación dependiendo de los resultados obtenidos. De nada sirve que realices evaluaciones y escuches las opiniones de tus empleados si la siguiente formación ya está planificada y no realizas modificaciones. Tu contenido debe ser un elemento vivo por eso, recuerda emplear herramientas de autor y un campus que te permitan actualizar fácilmente tus contenidos siempre que lo necesites.

Suele confundirse la creación de un curso de formación con cortar y pegar la información que debe aprenderse. Si le añades a este concepto una relación unidireccional en la que no permites que los empleados opinen sobre el curso es bastante probable que fracases.

Al usar un campus online tienes la opción de añadir un apartado para que los usuarios te pregunten cualquier tipo de duda. Este factor es imprescindible, ya que la formación no debe ser sinónimo de imposición o de complicación.

Te aconsejamos que establezcas unos objetivos alcanzables y que valores las virtudes y los defectos de tus empleados. Se trata de garantizar su aprendizaje, pero siempre adaptándose a sus características concretas.

Esperamos haberte aclarado todo lo relativo a la creación, el diseño y el uso de una formación e-learning para tus empleados. A buen seguro, sabrás tomar la decisión más acertada para conseguir que los empleados a tu cargo consigan adquirir los conocimientos necesarios para que no dejen nunca de progresar en sus propios recorridos profesionales y de ayudar a la compañía a alcanzar las metas previstas.